ENTREGAR TAREAS COMPLICADAS A LOS ROBOTS Y COSAS SIMPLES A LAS PERSONAS
En los últimos años, la dificultad de contratación se ha convertido en una situación común. La mayoría de las líneas de producción están compuestas por empleados mayores de 90 años. A diferencia de sus padres, son muy exigentes con su trabajo y apenas han sufrido. Si no están satisfechos con su trabajo, pueden renunciar. La máquina atornilladora automática resuelve este problema fundamental de forma excelente, y los fabricantes ya no tienen que dificultar la búsqueda de trabajadores cualificados.
En resumen, la mayor ventaja del atornillador automático es que permite a los robots realizar tareas complejas y a las personas realizar tareas sencillas. Desde la perspectiva del entorno de trabajo, se generan gases más o menos nocivos durante la operación de atornillado. Esto es inevitable en las líneas de producción basadas en la década de 1990. Con el atornillador automático, solo se requiere asistencia manual en el proceso de recogida y colocación de materiales, lo que reduce en cierta medida los conflictos laborales.